martes, 28 de abril de 2009
La retirada
Pies en polvorosa
- La OMS subió ayer lunes el nivel de alerta pandémica, de 3 a 4 en escala de 6.
- El virus llegó a 10 Estados mexicanos, y a 4 países más, en 24 hrs.
- Está a punto de confirmarse que 3 continentes (América, Europa y Oceanía) están infectados, lo cual transforma la situación en la temible palabra: "pandemia".
- El jefe de gobierno del DF afirmó ayer lunes que "en una escala del 1 al 10, la ciudad se halla en el nivel 8. Llegar al máximo nivel significaría cerrar el aeropuerto, las terminales de autobuses y suspender el servicio del metro".
- La población más afectada es la que tiene entre 25 y 37 años de edad.
- Los antivirales zanamivir y oseltamivir, recomendados por las autoridades para combatir la influenza (y que según la OMS no son efectivos en un 100%), no son entregados en los hospitales como dice el gobierno, sino que te mandan a comprarlo a la farmacia; están agotados en las principales farmacias de la capital y del Estado de México, y en otras ni siquiera están a la venta.
- Llevo cuatro días encerrada, sola como un perro, y ya camino por las paredes (si no tuviera internet estaría totalmente chiflada!).
lunes, 27 de abril de 2009
Influenza: ¡Mira cómo tiemblo!

Estornudar se vuelve sospechoso
Re-publico aquí un relato del fin de semana en el DF, del periodista Fidel Samaniego, del diario El Universal. Es muy elocuente como para agregar más palabras a la vivencia...
Una, dos, tres veces se escuchó: “¡aaatchuuú!”. Había estornudado, como millones de personas, millones de millones de veces.
Pero, en este caso, ojos de expresiones desconfiadas, temerosas, acusadoras, se clavaron en ella: la chica que con el rostro enrojecido, turbada, intentaba sonreír, no lo logró. Era una mueca lo que se dibujaba en su rostro. Un hombre que caminaba en sentido contrario al de la chica, se apartó varios metros, la rodeó, la evadió.
Y es que ayer, quien estornudaba, o tosía, o se sonaba la nariz, como millones de personas lo hacen normalmente, millones de millones de veces, era considerado o podía sentirse sospechoso, sospechosa, de portar el virus, de ser un peligro, una amenaza andante.
Una escena en la urbe más grande del mundo.
No, no era una ciudad fantasma.
Pero en ella, por sus calles, caminaban a pasos apresurados, con cubrebocas, serios, demudados, los fantasmas del miedo o hasta del pánico, de la incertidumbre, de los más variados, desatados y contradictorios rumores.
Un día absolutamente distinto a todos.
Poca, muy poca gente, unos cuantos atrevidos en los restaurantes, en los centros comerciales, en los templos, en los parques, en los clubes deportivos.
Casi se agotaron los DVD’s en los Blockbuster. Enorme la venta de películas o series en los comercios piratas. Ni una sola vacuna en una sola farmacia. Desde luego, casi imposible encontrar los pequeños y codiciadísimos pedazos de tela o algodón para cubrir narices y bocas, para —era el pensamiento general— proteger las vidas.
Temprano, en uno de los hospitales de lujo, en el sur de la ciudad, la actividad continuaba. Médicos, enfermeras, personal de limpieza y administrativo, todos con los rostros semitapados. Una sola persona acudía en esos momentos a que le sacaran sangre para que le hicieran estudios relacionados con otro padecimiento. “Tuvimos muchas cancelaciones, nunca había pasado. Ayer hablaron para cancelar, quienes lo hicieron, otros ni llamaron, no vienen, no vendrán. Los sábados tenemos lleno esto por la gente que viene a análisis para lo del colesterol por ejemplo, biometrías hepáticas”, explicaba una mujer tras el mostrador.
“Sí, hay aquí un par de casos, en terapia intermedia, aislados están, que podrían ser…podrían ser. Pero vino mucha, muchísima gente desde la tarde del viernes, en la noche y sobre todo en la madrugada de hoy al servicio de urgencias que decía tener los síntomas. En realidad, se trataba de las gripas convencionales, resfriados, o bronquitis, inflamación de vías respiratorias”, se animaba a platicar un internado, luego se retiraba sin despedirse de mano de quien le preguntó, tampoco hubo el habitual beso para su amiga, la joven que sí acudió a la cita.
Un día, en la ciudad de México, nunca imaginado ni por las mentes más fantasiosas, o pesimistas. Porque los besos, las risas, las bromas, la alegría, el relajamiento de los fines de semana se quedaron guardados, o fueron encerrados por la alarma, la precaución, el miedo.
Y flotaban en el viento caliente las preguntas sin respuesta. Las versiones sin fundamento conocido, de origen tan incierto como el mutante virus de la nueva y amenazadora clase de influenza.
“Dicen que no hay nada, que es lo mismo que cuando lo del chupacabras, que es para distraer a la gente de los problemas económicos y de la inseguridad”, sentenciaba con tono categórico el taxista.
“Es más grave de lo que dice el gobierno, pero ocultan cosas para no asustarnos”, aseguraba un vendedor de frutas.
“Me contaba una vecina que su hijo le dijo que un amigo que está bien conectado le platicó que lo que pasó fue que los narcos soltaron una bomba de microbios, o de bacterias, o de virus y que por eso no quieren que salgamos de nuestras casas”, platicaba convencida una mujer madura afuera de una iglesia que estaba a punto de cerrar sus puertas.
Aquella crónica musical de Chava Flores, de "Sábado, Distrito Federal", que cuenta: "desde las diez ya no hay donde parar el coche", por obra del virus de la influenza se esfumó. Había espacio suficiente para salir a rodar lento; aprender a manejar; estacionar el automóvil en el lugar soñado. Sábado Distrito Federal en el que, poco a poco, al lento, pesado, mórbido paso de las horas, desaparecía la poca gente que se atrevió a salir de sus casas, o tuvo que hacerlo.
Sin embargo, también hubo quienes salieron de la ciudad. En autobuses, en carros, por avión. No eran paseos, se trataba de huídas.
La ciudad sin conciertos, la de los museos y estadios cerrados, la de los pasos apresurados y las voces sin eco.
Y almas audaces, suicidas, inconscientes, aventureras, cada quien su circunstancia, unas cuantas, acompañaban sus soledades, veían en las pantallas fantasías más reales que lo que se vivía, se sentía afuera.
Era una ciudad con cubrebocas.
Y sus manos, sudorosas, iban angustiadas a la frente, rogando que fuera el calor del clima lo que se sentía en la piel y no la fiebre de la enfermedad.
Y una mirada que manifestaba todo y nada. Y un silencio que crecía, que gritaba su miedo. Y si tosía o estornudaba se volvía sospechosa, peligrosa, amenaza.
Sábado Distrito Federal como nunca antes se había vivido, como no se había pensado, como nadie lo habría deseado.
Una ciudad por la que, con la llegada de la noche, seguían caminando los fantasmas de la incertidumbre, los rumores, el miedo y hasta la psicosis.
domingo, 26 de abril de 2009
Se extiende la psicosis
¿Cuál es la situación actual en la epidemia de influenza porcina?
Cada vez se ve más negra…
- Los casos de muerte ascendieron de 68 a 91 en las últimas 24 hrs. ¡23 muertes más!
- Los partidos de fútbol de este sábado en el DF se realizaron "a puertas cerradas", sin público. Todos los museos y teatros también se cerraron, las actividades culturales se suspendieron en su totalidad, más de 60 pubs bailables de la ciudad (llamados aquí "antros") cerraron preventivamente... No hay nada interesante para hacer el fin de semana fuera de tu casa, hay que entretenerse dentro de ella.
- El Episcopado decidió suspender todas las Misas de todas las iglesias, en todo el valle de México (Distrito Federal y Estado de México). Sólo se emitirá una Misa dominical por televisión. Para que la Iglesia Católica decline la obligación de cumplir el precepto dominical para sus fieles, tiene que ser algo grave, ¿no? Eso pienso yo, que conozco un poco los manejos internos de la Iglesia y nunca supe de un caso así.
- Como dato, desde el terremoto del 85 -donde murieron más de 10.000 personas y se cayó media ciudad- no se suspendían las clases escolares masivamente en la ciudad de México. La noticia de este sábado: "se mantiene la suspensión de actividades de todos los niveles educativos, comenzada el viernes, en el Distrito Federal, Estado de México y San Luis Potosí, las cuales se reanudarán "en principio" el miércoles 6 de mayo". Decir todos los niveles incluye también “mi” nivel, el universitario, por lo que esta noticia me empezó a desesperar…
- La OMS afirma que el virus “tiene un potencial pandémico”. Para quienes no lo saben, la palabra “pandemia” en jerga sanitaria es muy fuerte, y no es frecuente que se utilice… significa que una epidemia rebasa los límites de los países y continentes, se hace global, y no tiene cura.
- A propósito, hay casos registrados al menos en 3 Estados de USA, por lo que la preocupación ya se va extendiendo fuera de México... La mayoría de los países está tomando medidas preventivas en los aeropuertos para "recibir" a los pasajeros procedentes de México de una forma muy especial... cerco sanitario, lo llaman.
- Ya está confirmado que son los adultos jóvenes y con buena salud el grupo más afectado. No han muerto ancianos ni niños… Esto es lo más preocupante, porque la población habitualmente más fuerte, activa y sana está en riesgo ahora… ¡y yo también soy adulta joven!
- Según la ONU en un folleto explicativo para sus representantes internacionales (www.onu-influenza.org): "es de esperarse que pronto se presente una nueva pandemia", pues "las pandemias de influenza son eventos raros pero recurrentes. Durante el siglo XX ocurrieron tres pandemias: 1918, 1957 y 1968". Por lo tanto, la ONU "ha preparado un Plan de Acción ante el riesgo de una pandemia el cual consiste en una serie de acciones para proteger a los funcionarios y sus familias”. ¿Lo más importante ahora es que cada organismo internacional defienda lo suyo y se preocupe de la salud de sus funcionarios? Política, política…
- En la misma línea, el Gobierno Federal sigue afirmando que cuenta con un millón de dosis del antiviral para este virus, y que efectivamente es el medicamento indicado para tratar esta cepa. Sin embargo, investigadores de la UNAM revelaron que este virus está siendo estudiado desde el año pasado, y que la OMS analizó en octubre de 2008 las reacciones del virus porcino (H1N1) con las drogas que contiene el tratamiento que ofrece el Estado Mexicano (“Oseltamivir” y “Zanamivir”), que fueron creadas para atacar la gripe aviar en el 2005, y en el 97% de las muestras, no fueron efectivas. Eso significa, claramente, que no existe aún una cura para la epidemia que estamos viviendo. Como esto contradice la versión oficial, y no quiero que me apliquen el artículo 33 de la Constitución, aclaro que está explicado por los expertos, en el programa del 24 de abril de Carmen Aristegui en “CNN en Español”, y lo pueden consultar aquí.
Conclusión: no les recomiendo por ahora venir a México, y yo espero poder viajar en junio hacia el Sur como lo tengo planeado, obviamente si después de todo esto no se declara una cuarentena…
viernes, 24 de abril de 2009
Influenza Express, o Apocalipsis Now
De un momento al otro, una ciudad de 30 millones de habitantes se psicotizó: ¡nos invadió la influenza! 1009 infectados en el DF y alrededores, 68 muertos de los cuales se ha comprobado que en 20 casos la causa sería este virus, algunos infectados en otros Estados de la República… Anoche salió el Secretario de Salud a comunicar en cadena nacional que estamos frente a una epidemia, y es una emergencia sanitaria que exige cerrar escuelas, suspender actividades masivas de todo tipo, recomendar a la gente no salir de las casas, “no saludar de beso ni de mano”, usar tapabocas, no compartir vasos ni cubiertos, al estornudar cubrirse con la parte interna del codo y no con la mano, lavarse éstas permanentemente, no acudir a centros de salud para evitar contagios, no automedicarse (¿cómo se combinan estas dos órdenes?), no estar con otras personas en lugares cerrados (nada de ascensores, señores), usar pañuelos desechables y tirarlos inmediatamente, ventilar la casa, y muchas recomendaciones por el estilo, para que finalmente la gente saque la conclusión de que lo mejor es encerrarse en la casa hasta nuevo aviso… Una amiga que estaba estudiando conmigo, llamó a su marido para decirle que “de camino a la casa” compre condones, así no se aburren el fin de semana encerrados… otra gente compró inmediatamente muchos litros de agua, y todo tipo de alimentos… muchos se retiraron de su trabajo a mediodía por precaución, o simplemente no fueron a trabajar porque estaban resfriados… en las farmacias de la ciudad se agotaron los tapabocas… con urgencia fueron vacunados todos los trabajadores de la salud... el plazo para la declaración anual de impuestos se aplazó, del 30 de abril al 31 de mayo… el Congreso decidió hacer una revisión médica a cada persona al ingresar al edificio... todos llamaron por teléfono a sus familiares, para comprobar el estado de salud de cada uno… la Universidad cerró todas sus sedes por tiempo indefinido y suspendió todas las actividades culturales y de extensión… en el aeropuerto y las terminales de autobuses, todos tienen que llenar un formulario acerca de sus síntomas, para que un médico decida si pueden viajar... de los 5 partidos de fútbol programados para el fin de semana, ya hay 2 suspendidos… ¿Qué concepto resume esta situación? ¡¡¡PSICOSIS COLECTIVA!!! Lo peor es que Barak Obama estuvo la semana pasada en México, y ahora la Casa Blanca está analizando si se pudo haber contagiado de la influenza... y la OMS envió urgentemente un grupo de expertos a México a estudiar el virus! Ahora están analizando si siguen autorizando la salida de personas de México hacia otros países... ¡estamos todos infectados! Bueno, aprovecho para informarles que este brote de influenza se debe a una cepa nueva, desconocida, que proviene del cerdo/chancho/marrano, y sus síntomas son: Si Usted tiene cualquiera de estos síntomas acuda a su médico para que lo registre en la lista nacional, mantenga la calma, compre una tienda de campaña y aléjese de todo el mundo, porque nadie quiere contagiarse de su influenza porcina.